TINY TINA’S WONDERLANDS | REVIEW
¡Bienvenidos al maravilloso mundo de Bunkers and Badasses, donde aventuras extrañas aguardan!
La mítica desarrolladora Gearbox, junto con 2K, responsables de la famosa serie de videojuegos Borderlands, se aportan un puntito más entre la comunidad con su última entrega: Tiny Tina’s Wonderlands, estrenado el pasado 25 de marzo. Una trepidante nueva aventura que llamará la atención de los nuevos y removerá la nostalgia de los veteranos con el clásico humor que acompaña a la querida saga. La presente review fue realizada en un ordenador de mediana gama y gracias a una versión de prensa obtenida por gentileza de la distribuidora.
Una aventura dentro de un tablero
Tiny Tina’s Wonderland es un videojuego de aventura y disparos en primera persona con elementos de RPG que ubica al jugador como compañero de juegos de mesa de la queridísima Tiny Tina cuando aún era niña, quien es la extravagante líder del famoso juego de tableros de rol similar al D&D: Bunkers and Badasses, donde junto con otros dos sujetos igual de extraños seremos partícipes en un loco juego de rol que asumiremos el papel del “Labra destinos”, con quien deberemos atravesar un extraño mundo fantástico medieval y derrotar al cruel jefazo final.
Tiny Tina parece estar muy abocada a mantener como sea la coherencia con un mundo medieval, por lo que se pueden apreciar pequeños detalles como marcas de armas curiosamente parecidas a las «originales», que todas las armas lanzan o flechas o magia o que las granadas son conjuros con efectos visuales muy variados. En fin, elementos que lo hacen pertenecer a la saga pero que ayudan a marcar una diferencia que le otorga a esta entrega una individualidad particular.
¿Para que un dado cuando tengo un arma?
Más allá de estar en un juego de mesa, nada más alejado de la realidad con respecto al reglamento clásico del mismo: no existe un sistema de turnos o posibilidades, sino que sus mecánicas son iguales a sus títulos hermanos. Primero se deberá crear un personaje con un gestor de creación muy detallado y luego decidir especializarse en hasta seis clases con árboles de habilidades completamente distintos que definirán el estilo de juego del jugador. Luego de ello, durante la aventura, no existirán elementos de rol clásico salvo un sistema de niveles basado en puntos de experiencia, desbloquear habilidades, entre otros.
El plato fuerte del juego se halla en dos factores: primero en un sistema de generación aleatorio de armas y hechizos, las cuales tendrán no solo un daño base, sino distintos tipos de daños elementales, porcentajes de críticos, modos de disparo alternativos y animaciones únicas (como por ejemplo tirar una ola literal de balas, un arco mágico que atraviese todo, o meteoritos que caigan del cielo). En segundo lugar los estilos de juego según la clase cambian mucho la forma de aproximación, dado que la naturaleza de sus poderes definirá si el combate sea cercano o lejano, se confíe en el poder bruto de las armas o de los hechizos, entre otros.
Enemigos, loot y amigos
En cuanto al gameplay, se encontrarán decenas de tipos de enemigos con distintas habilidades que serán de tres tipos: minions (los más numerosos y débiles), los fortalecidos (un tanto más fuertes y blindados) y los jefazos con diversas habilidades, fuerte ataque y blindados que supondrán un desafío en donde el jugador deberá adaptarse. En cuanto a los escenarios, salvo la ciudad principal donde se podrán obtener misiones y tomarse un respiro, serán en su mayoría campos de batalla con oleadas de enemigos, secretos por descubrir y toneladas de loot por descubrir, donde se podrán obtener armas y munición para fortalecerse sin parar.
Pero ¿Qué sería un juego de rol de tablero si se jugase solo? Bueno, a no preocuparse, porque el título, así como todos sus antecesores, tiene un fantástico modo multijugador en donde se podrá junto con un amigo o compañero superar la misión principal o jefazos difíciles que harán de la aventura un disfrute multiplicado en diversión por la lluvia incesante de tiros, explosiones y delicioso loot. Asimismo, hay una modalidad de juego incluida tipo «Arena», pensada para aquellos que quieran probar su arsenal contra otros aventureros sedientos de batallas.
Un estilo único de diseño
Así como anteriores entregas, el juego sigue con el característico diseño pensado por Gearbox, en donde todo el mundo y los personajes asemejan a un estilo cartoon/comic, donde todo pareciera estar dibujado a mano, pero no por ello arruinar la inmersión o el nivel de detalle, sino que con el pensamiento de “menos es más” se obtiene una experiencia redonda y divertida. Otros tipos de juegos que también poseen este estilo se encuentran entre los de aventura gráfica de Telltale (como Walking Dead, por ejemplo).
Más allá del aspecto caricaturesco, los detalles gráficos invertidos en iluminación, texturas, escenario, explosiones y animaciones da sus frutos al ofrecernos un mundo digno de mirar, pero pensado para que el jugador se quede absorto en su aventura, sino que el entorno acompañe a las formas humorísticas y de acción que tanto destacan a esta entrega, haciendo que la atención se enfoque principalmente a la aventura que se tiene adelante.
Como conclusión se podría decir que este juego destaca entre las otras entregas de la saga en sus componentes de creatividad, notándose los intentos por crear un juego interesante y novedoso, pero manteniendo las bases que forman una coherencia con sus títulos hermanos, El resultado es una aventura muy divertida tanto para jugarla solo como con amigos.