Super Mario Bros. Wonder | REVIEW

Un viaje al Reino Flor que apunta directo a pelear el GOTY.

No dejamos demasiadas dudas en el encabezado anterior, ¿cierto? Bueno, es que nuestra opinión es difícil de ocultar cuando quedás perplejo después de vivir una experiencia absurdamente maravillosa. Super Mario Bros. Wonder es un juego que no te va a dejar indiferente, no está ni cerca de ser “continuista” y cuando le dedicás unos minutos de tu tiempo te das cuenta inmediatamente que estás frente a una obra de arte. Demos un repaso por lo último que nos dejó el plomero más crack de todos. 

Una intro a la historia

En esta aventura inaugurada en 2023, Mario y sus amigos reciben una invitación para visitar el Reino Flor, un lugar lleno de magia y colores alegres. Sin embargo, al aterrizar se encuentran con que el malvado Bowser ha secuestrado a la princesa Florina, la gobernante del reino, y ha robado las Flores Maravilla, unas plantas especiales que otorgan poderes increíbles a quien las posee. El bigotón y su banda deberán recorrer los diversos mundos de este reinado, enfrentarse a los compañeros de Bowser y recuperar las estas flores para salvar a la reina y restaurar la paz. A ver, para ser honestos la historia es muy tranquila, apta para todo público y jamás será el fuerte de un videojuego de Super Mario Bros, dado que es una simple excusa para disfrutar del grandioso gameplay. Este caso no es la excepción y resulta en una experiencia sumamente disfrutable.

La jugabilidad: el peak del entretenimiento

Después del tentempié que te da la intro de la historia, pasamos al plato fuerte que es, señoras y señores, el gameplay. Acá nos vamos a pegar una vuelta por los orígenes del plomero, ya que Nintendo decidió diseñar este título con una hermosas plataformas de desplazamiento lateral, pero que también introduce novedades y sorpresas. 

El manejo de los personajes es muy simple e intuitivo, permitiéndonos saltar, correr, agacharnos y atacar con extrema facilidad. Wonder cuenta con un sistema de vidas que se pueden perder al recibir daño o caer al vacío, pero también se pueden recuperar al recolectar monedas o encontrar champis.

La novedad primordial de este videojuego son las Flores Maravilla, prácticamente objetos potenciadores que transforman a los pjs en diferentes formas animales con habilidades únicas. Por ejemplo, la Flor Elefante -la más fachera de todas- permite lanzar agua por la trompa y mover objetos pesados; la Flor Conejo permite saltar más alto y cavar túneles; la Flor Pingüino permite deslizarse por el hielo y lanzar bolas de nieve; y así con cada una. Estas transformaciones nos parecieron la creme de la creme, debido a que añaden variedad y diversión al gameplay.

Con respecto a los modos de juego, acá se ofrece uno multijugador local u online para hasta cuatro gamers en simultáneo, que pueden cooperar o competir entre sí para completar los niveles. Además, a diferencia de otras obras del plomero contamos con un sistema de insignias que se pueden conseguir al cumplir ciertos objetivos o al comprarlas en la tienda de Poplin, un NPC que aparece eventualmente en el mapa del mundo. Estas insignias son marcas otorgan ventajas a su usuario, como aumentar la velocidad, salto o resistencia.

Abran paso al líder del level design

El Reino Flor está dividido en ocho mundos temáticos hermosísimos, cada uno con varios niveles. Los escenarios son únicos y originales, con distintos tipos de terreno, obstáculos, enemigos y, como todo clásico de la casa, secretos. Algunos de los desafíos tienen mecánicas especiales, como carreras contrarreloj, saltos de gravedad o vehículos que se pueden manejar. Al final de cada mundo hay un boss final que se debe aplastar para avanzar al siguiente.

Sí, como viste en los tráilers, el diseño de niveles es uno de los puntos más fuertes de este producto porque se adapta al nivel de habilidad de cada jugador, aunque con una tendencia accesible. A nuestro criterio, estos tienen una duración adecuada, ni muy cortos ni muy largos, y cuentan con puntos de control que se activan al pasar por ellos. 

Unas vistas espectaculares

Todo habla por sí solo, Super Mario Bros. Wonder nos deleita con un apartado visual precioso y meticulosamente detallado. Este le saca todo el provecho a las capacidades técnicas de la Nintendo Switch y corre como una seda sin un mínimo fallo técnico, típico de los queridos nipones. 

Conclusión de CDF Gaming

Lo que ya se esperaban, amigas y amigos lectores: Super Mario Bros. Wonder un súper SÍ. Esta obra es una mezcla perfecta entre encanto y desafío constante. Nadie te va a decir que los jefes son imbatibles, el reto está en que lo puedas bajar en pocos segundos o speeruneando como loco; vos dedicate a disfrutar este juegazo como quieras. Gracias a su game design perfecto, sus gráficos lindos y una dirección de niveles brutal, nos resulta completamente sencillo recomendarles la nueva propuesta de Nintendo.