Jujutsu Kaisen Cursed Clash | REVIEW
Un tanque del anime por fin llega a nuestros joysticks.
Gege Akutami es un mangaka que, no podemos negar, tiene un talento brutal. En medio de tantas, pero tantísimas obras del shonen, el tipo supo destacarse desde el 2018 con Jujutsu Kaisen y posicionarla como una obra de culto contemporáneo. La mezcla perfecta de su narrativa cautivadora, personajes carismáticos y estética visual impactante han conquistado a audiencias de todo el mundo, incluida la argentina. La serie ha redefinido los estándares del género de acción y fantasía, al mismo tiempo que ha explorado temas profundos como la amistad, el sacrificio y la lucha contra la oscuridad interior. La popularidad de JJK tiene que ver en gran parte al acuerdo llevado adelante con Mappa, la famosa animadora que tuvo su ápice de éxito con Attack on Titan o -posteriormente- con Chainsaw Man.
Nuestro querido Jujutsu Kaisen ha trascendido los límites del medio para el que fue creado (los “cómics japoneses”), expandiéndose a otros aspectos de la cultura pop, como los videojuegos, la moda y muchos otros productos de consumo. Su impacto se siente en convenciones de cómics como la reciente Anime-Con y eventos de la industria del entretenimiento, donde los cosplayers recrean con entusiasmo y pasión los trajes de los protagonistas. Hoy tenemos la fortuna de hablar del último título que se publicó de la mano de Byking, Gemdrops y la publicación de nuestra querida Bandai Namco.
Jujutsu Kaisen Cursed Clash se encasilla como un título de lucha en el que los usuarios pueden elegir entre una no-tan-variada serie de personajes de la plantilla del manga. El juego cuenta con un elenco de aproximadamente 15 personajes, entre los que se encuentran los protagonistas Yuji Itadori, Megumi Fushiguro, Nobara Kugisaki y Satoru Gojo, así como otros hechiceros y espíritus malditos, como Sukuna, Mahito, Jogo, entre otros.
Cae de maduro mencionarlo, pero cada personaje tiene su propio estilo de combate basado en sus skills y técnicas de la obra literaria. Por ejemplo, Itadori puede usar su fuerza física y su velocidad, así como invocar a Sukuna para aumentar su poder; Megumi puede invocar a sus shikigami, como el perro divino, el sapo o el dragón; Nobara puede usar sus clavos y su martillo para atacar a distancia; y Gojo puede romper el universo con sus seis ojos y su energía ilimitada para crear barreras, manipular el espacio y el tiempo, y armarse un tole-tole con rayos por todo el mapa.
Siguiendo un poco la línea del gameplay, los gamers pueden elegir a un compañero de equipo, y crear combinaciones interesantes en términos cooperativos (online y en la misma plataforma). Por ejemplo, se pueden unir entre Itadori con Fushiguro para ejecutar un ataque combinado llamado “Black Flash”, que consiste en un golpe sincronizado con la energía maldita; o se puede mixear a Gojo con Todo para ejecutar un ataque combinado llamado “Boogie Woogie”, que consiste en intercambiar de posición con el enemigo y sorprenderlo con un golpe.
A nivel combate me recordó mucho a las últimas entregas de Bandai Namco, sobre todo el caso de Dragon Ball Xenoverse 2 o alguno de los últimos de Naruto. A mí particularmente me gusta mucho ese estilo más libre en 3D, aunque sabemos que muchos otros jugadores prefieren algo más como FighterZ, para gustos los colores.
El multijugador online también te da un espacio interesante para customizar tu personaje, con diferentes trajes, accesorios y efectos visuales, que se pueden obtener al jugar al juego, o al comprarlos con dinero real. Estos elementos de personalización claramente no afectan al rendimiento de los peleadores.
Al igual que los combates, el estilo 3D se replica en todos los pilares del proyecto, ya sea en la historia (que sigue los pasos de los primeros capítulos del anime), como así también en transiciones animadas y demás. Esperábamos quizás un poco más, si bien se nota un buen laburo por parte de los dos estudios desarrolladores, no logramos conectar del todo con el estilo o la ejecución escogida.
Tuve mis altibajos con Jujutsu Kaisen Cursed Clash, lo esperé mucho porque soy fanático de la serie (manga y anime), pero terminé encontrándome con una obra que no me terminó de llenar del todo. Hubo momentos copados, como la sensación del cooperativo, pero otras que me resultaron algo limitadas como la poca durabilidad de la historia, así como su escueto repertorio de personajes jugables. Así y todo, tiene buenas intenciones que podrían rectificar el camino a través de contenido post-lanzamiento.