Call of Duty: Black Ops 6 | BETA | REVIEW

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Un recorrido por lo nuevo de Activision.

La serie Call of Duty: Black Ops comenzó en 2010 ambientada inicialmente durante la Guerra Fría. La trama sigue a Alex Mason, un agente de la CIA, mientras intenta desentrañar una conspiración que involucra números de transmisión y lavado de cerebro. La secuela, Black Ops II, se desarrolla en dos períodos: los años 80 y un futuro cercano en 2025, explorando las consecuencias de las acciones de Mason y su hijo, David. Black Ops III lleva todo este enredo aún más lejos en el futuro, al año 2065, donde los soldados cibernéticos y la inteligencia artificial juegan un papel crucial. Black Ops 4, lanzado en 2018, se centra más en el multijugador y el modo Battle Royale, Blackout, dejando de lado una campaña tradicional.

Con Black Ops Cold War, la serie regresa a sus raíces de la Guerra Fría, situándose entre los eventos del primer y segundo juego. Este reciente tanquecito sigue a un nuevo protagonista, Bell, en misiones encubiertas para detener una amenaza soviética. Finalmente, Black Ops 6 nos traslada a principios de los años 90, en el contexto de la Guerra del Golfo. Aquí, una fuerza oscura se infiltra en las esferas más altas del gobierno estadounidense, creando una narrativa de espionaje y acción que promete mantener a los jugadores al borde de sus asientos.

La beta de Call of Duty: Black Ops 6 ha dejado una impresión mixta entre nuestra redacción de CDF Gaming, y personalmente -habiendo jugado en Xbox Series X-, creo que tiene tanto puntos fuertes que me hace dejar de lado todas aquellas cositas que merecen un ajuste. Una de las novedades más notables es el sistema de movimiento omnidireccional, que permite deslizarse, correr y zambullirse en múltiples direcciones. Aunque esta mecánica añade una cucharada más de complejidad y dinamismo, algunos no terminamos de adaptarnos del todo (ojo, quizás sea cuestión de tiempo), puesto que puede ser un poco complicada de manejar con un joystick. La velocidad de eliminación (TTK) ha sido ajustada para ser más rápida que en entregas anteriores como Black Ops 4 y Cold War, lo que puede sentirse en desacuerdo con las nuevas mecánicas de movimiento.

Durante el primer fin de semana de la beta, los jugadores de todo el mundo pudieron probar cuatro mapas: Derelict, Rewind, Scud y Skyline. Derelict ha sido el favorito de muchos por sus líneas de visión largas y su estética sobrecrecida, mientras que los otros mapas han recibido críticas por ser más genéricos. En cuanto a los modos de juego, se incluyeron clásicos como Team Deathmatch, Domination y Hardpoint, así como modos más recientes como Kill Order y Face Off.

Si vamos a lo importante, que son los gráficos para estas obras hollywoodenses, desde los escenarios hasta los mínimos detalles de las escopetas, se siente bien ajustado y las animaciones son impresionantes. La transición al nuevo motor de Call of Duty, introducido por primera vez en Modern Warfare de 2019, ha sido un cambio positivo que se nota en la fluidez y reina el realismo.

Sin duda alguna, se ha mostrado que Treyarch sigue innovando dentro de la franquicia. El gameplay sigue siendo sólido y adictivo, pero las nuevas mecánicas de movimiento y la selección de mapas podrían necesitar ajustes antes del lanzamiento final. Espero que la versión final logre equilibrar estos elementos y ofrezca una experiencia aún más pulida y emocionante para todos los gamers que se manijear con “Termoduty”.

Dato importantísimo: va a estar incluido en el servicio de Xbox Game Pass.

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