Dragon Quest Builders | REVIEW
Square Enix lanza el primer Dragon Quest Builder en PC y los arquitectos digitales festejamos.
Era muy extraño pensar que no teníamos la primera entrega original de Dragon Quest Builders en computadora. Si bien podríamos pensar que lo más lógico -y cómodo- para “trabajar” en estos juegos de crafteo es la Switch por su versatilidad, la PC creo que particularmente es la plataforma ideal para volcar toda mi creatividad.
El mundo de Alefgard está claramente inspirado en Overworld (Minecraft) y lo creemos un acierto total, ya que con assets simples se nos da a todos los gamers una posibilidad casi ilimitada de explotar nuestras ideas y llevarlas a la ejecución con mucha facilidad.
Ahora bien, ¿cómo se ve el juego? ¿qué tan divertido u obsoleto quedó? demos un repaso general.
Primero y principal tenemos que hablar de todas las características mejoradas. La versión de Steam ofrece una serie de optimizaciones para la creación, junto con el contenido exclusivo de la versión mobile. En esta edición, los constructores podrán experimentar una mayor libertad creativa con la capacidad de colocar bloques con un solo clic del mouse y destruir objetos de manera más sencilla. Además, la función «Big Bash» permite a los usuarios destruir varios objetos a la vez, facilitando la remodelación y el ordenamiento de materiales.
Si no estuviste involucrado con las versiones originales y la móvil, «Terra Incognita» no solo amplía las posibilidades de construcción, sino que también agrega más elementos de todo tipo al gameplay. Desde figuras de monstruos hasta objetos coleccionables, este contenido adicional el pasar del tiempo en Alefgard de una forma divertida. Los arquitectos digitales también podremos compartir sus creaciones con amigos o la comunidad mediante «Build Cards», mientras exploramos y construimos desde el cielo con la ayuda de una alfombra mágica, realmente muy valiosa. No podemos dejar de mencionar el combate, que pese a los prejuicios de creer que peca de simpleza, es en realidad muy profundo y estratégico en ciertas ocasiones.
Si tuviéramos que decir qué fue lo que más nos gustó de este port de 2024, tendríamos que disputar entre los gráficos y la banda sonora. Verdaderamente la música de todos los Dragon Quest es preciosa, ni hablar de esta versión de Builders, que nos llena de arpegios y armonías de fantasía que te transportan a una aldea plagada de monstruos coloridos y mucha magia. Los efectos visuales nos generaban algunas dudas, más que nada debido a que es un juego de 2016, pero el trabajo de chapa, pintura y pulido de Square Enix nos ha encantado y creemos que revitalizó por completo al proyecto.
Hay mucho más para decir, pero queremos que ustedes mismos puedan explorarlo y descubrirlo poniéndose manos a la obra, ya que es la forma más linda de encontrarse (o reencontrarse) con esta maravillosa saga. Hay muchísimas horas de contenido con la campaña, tantas otras de misiones secundarias y otras miles si pones a prueba tu ingenio y skills de crafteo. Dicho sea de paso, en Steam podés encontrar este juego solo, o si quedaste muy manija al respecto, un pack con la secuela. El año 2024 para Square Enix ha comenzado muy bien.